El Gobierno de Pradales vuelve a rectificar a Sagardui y decide ahora reabrir las Urgencias del centro de Vitoria

El estado de salud de la Sanidad pública ha bajado del segundo al tercer problema de la población vasca por la inquietud creciente por la vivienda, pero sigue siendo una preocupación para el 35%, exactamente como hace un año. Son datos de un Sociómetro dado a conocer este mismo viernes. En este contexto, el lehendakari, Imanol Pradales, y el consejero de Salud, Alberto Martínez, siguen realizando anuncios para “mejorar” la atención en Osakidetza. Este viernes ha llegado uno nuevo que, a la vez, es una nueva rectificación de las decisiones de Gotzone Sagardui. El Gobierno vasco ha decidido la reapertura de las Urgencias del centro de Vitoria, cerradas en la pasada legislatura bajo la premisa de que era más operativo centralizar toda la atención en el nuevo edificio de Txagorritxu.
Martínez, en declaraciones a los periodistas tras un acto en el centro de salud de San Martín, también reabierto como PAC este mes de febrero después de que se defendiera la oportunidad de su clausura años atrás, ha confirmado que serán urgencias “generales”, que estarán “abiertas al público” y que tendrán turnos de “24 horas”. Hasta ahora, se había justificado que no era un recorte de servicios porque formalmente seguía habiendo atención urgente para pacientes que entraban por ambulancia o derivación, aunque no había posibilidad de acudir a ellas como al resto de hospitales. La información objetiva mostraba que esos cambios habían supuesto más demoras y se habían producido numerosas movilizaciones y quejas de oposición, sindicatos e instituciones locales. Se prevé que las nuevas-viejas Urgencias del hospital de Santiago estén operativas desde el 1 de abril, aunque en dos semanas habrá ya un plan más detallado.
El consejero ha confirmado que la reapertura del PAC ha tenido “buena acogida” y “excelente valoración”, por lo que seguirán aplicando cambios. En ese caso no hubo aumentos de plantilla pero en las Urgencias de Santiago sí habrá “más” profesionales que los que ahora atienden el servicio, ha comprometido. Las rectificaciones no solamente afectan a Vitoria, ya que las ha habido con el servicio de cirugía cardíaca de Basurto, con el almacen logístico de Iurreta o con la contrata de ambulancias, ya que se rescindió la adjudicación a Grup La Pau después de que se defendiera que era una empresa “solvente”.
Martínez, preguntado por los cambios con respecto a la etapa de Sagardui, compañera suya en el PNV y ahora al frente de una clínica privada en el centro de Vitoria, ha asegurado que él “toma decisiones” en función de la “demanda asistencial”, no por criterios políticos. “Este PAC es un ejemplo”, ha señalado desde la sala de espera del ambulatorio de San Martín, lleno de pacientes durante la comparecencia, incluido el director de orquesta Juanjo Mena y muchas madres con niños pequeños. “Sabemos qué hacer y sabemos cómo hacerlo. Tenemos presupuesto pero nos faltan médicos”, ha señalado Martínez sobre la gran limitación que ha encontrado para seguir reforzando Osakidetza. Ha insistido en que Euskadi no tiene competencias para corregirlo, aunque sí ha lanzado propuestas al Estado. La más insistente es que se permita a los facultativos de atención primaria que continúen en servicio (si lo desean) hasta los 72 años. “En este momento, el nudo gordiano del sistema de salud en Euskadi, en España y en Europa no es otro que el déficit de médicos”, ha razonado.
El lehendakari también ha querido poner en valor las medidas adoptadas para mejorar Osakidetza en ocho meses, que se traducen en menos espera quirúrgica, en ambulatorios o para pruebas. “Hemos conseguido ya algunos objetivos”, ha señalado remarcando que prometió para el primer año, que se cumplirá en junio, que la sociedad percibiera ya mejoras. Es importante “escuchar a quien sabe” y “colaborar con quien trabaja en el sistema”, ha manifestado. Con todo, ha pedido no solamente mirar a los cambios “a corto plazo” sino también a las necesarias “transformaciones” a largo plazo. En ese sentido, ha puesto en valor el trabajo de la mesa puesta en marcha para cerrar un pacto de salud. En principio, tenía que tener para marzo un consenso pero todo apunta a que se retrasará unas semanas. Ahora está en la fase de diseñar las medidas concretas después de que los agentes que componen ese foro -Gobierno, oposición, sindicatos, universidades o colegios profesionales- hayan cerrado ya un diagnóstico.
“No es suficiente. Nos queda mucho camino por recorrer. Hay que seguir mejorando la atención sanitaria de la ciudadanía vasca. El acuerdo es nuestra forma de hacer”, ha solemnizado también Pradales, que ha puesto en valor el buen trabajo de su consejero de Salud, de la directora general de Osakidetza, Susana López Altuna, y de todos los profesionales del Servicio Vasco de Salud. Pradales ha aseguado, en todo caso, que no se puede “caer en autocomplacencias” y ha admitido que “a veces” también se “equivocan”.
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